domingo, 4 de enero de 2009

No temas...

No temas,... yo estoy contigo.
El miedo no trae nada bueno, dejas de ser tú misma. Pero yo tengo miedo, demasiado miedo.
Odio las noches a oscuras, solas en el salón con un montón de cosas por pensar, la muerte me acecha entre sombras, aunque también la temo de día.
Me da miedo el rechazo, no me siento preparada para quedarme atrás, sentada en un taburete de un bar cualquiera, sintiendo que nadie me ve.
Tengo un problema y lo sé.
El miedo me acompaña y me guía a menudo. Me advierte de las cosas que pueden que no salgan bien. Creo que hay distintos tipos de miedo, grados que se jerarquirizan.
Cada día es una lucha contra el miedo, una batalla a ganar en donde la caballería resucita entre sueños, para tener las armas preparadas y combatir una vez más. No importa el tiempo que pase, las batallas que se ganen, siempre existe una guerra que no podemos perder. Perder sería hundirse, sucumbur a la sin razón que el miedo tatua, sería como no haber vivido nunca y no volver a vivir.
Las reinas no tienen miedo, las hadas no tienen miedo, la Campanilla de mi chaqueta no tiene miedo ellas son mi batallón, soy su líder, soy la jefa.

1 comentario:

Unknown dijo...

Tener miedo no es ningún problema, sino fuera por él iríamos por ahí corriendo riesgos evidentes. Pero nunca hubo un agujero tan hondo como para que la jefa del batallón de broches piense un solo segundo que de ese no se puede levantar. un besooo!!
además, no pasa nada porque yo estoy contigo.